"¿Tú crees que disfruto con esto?
¿Qué me gusta verte así?
Es que no sé porque te empeñas...No sé, no
sé porque te cuesta tanto aceptar el orden de las cosas Julia...
No lo entiendo mi vida... no lo
entiendo."
EL ORDEN DE LAS COSAS. Nominado
al premio Goya 2011 al mejor cortometraje de Ficción.
19 minutos y 58
segundos. Ese es el tiempo que no mantienen los directores de este intenso
corto atentos a cada detalle de la filmación.
Impactante, esa es la palabra.
Día a día llegan a
nuestros oídos datos de mujeres fallecidas a causa de violencia de género,
formas brutales en las que maridos asesinan a sus mujeres, y sentencias
dictadas que son de todo menos justas.
Por desgracia el ser
humano vive acostumbrado a ese tipo de noticias, llegan a nosotros tan a menudo
que las tomamos como habituales, y ya no reaccionamos con sorpresa, indignación
o furia contra esos actos. Son tantos los casos de violencia producidos en un
año en una ciudad, que un acto tan cruel, tan despiadado y tan ruin, es algo
que por desgracia está muy integrado en nuestra sociedad. Ya no reaccionamos
ante ellos.
Pero un día descubres
historias, gente que dedica su tiempo a reivindicar contra estos actos, que
lucha continuamente por el respeto y la integridad de las mujeres, por expulsar
estos comportamientos de la sociedad y vivir en un mundo de tolerancia y
respeto hacia el otro.
Gente que lucha por
nosotras, y eso, merece que todos nos sumemos a ellos.
EL ORDEN DE LAS COSAS.
El maldito orden de las cosas...
Julia es una mujer casada.
Marcos, su marido, proviene de una familia un tanto peculiar. Entre sus
hábitos, está el maltrato a su esposa. Educarla como a un perro.
Gota a gota va
reuniendo el valor para cambiar el orden de las cosas. La bañera poco
a poco se va llenando, hasta que de repente, se vuelve a vaciar. El miedo se
apodera de ella y continúa aguantando.
Sumergirse en el agua,
es buscar su libertad. Allí nadie la molesta, nadie puede contactar con ella,
es la búsqueda de su escapatoria. Aunque también es lo que le ahoga, está
encarcelada, no puede salir de ahí, porque el agua nunca rebosa, no consigue
esa ansiada libertad.
Una y otra vez, la
bañera se vacía, todo vuelve a la realidad, las heridas salen a la luz, todo lo
soñado se esfuma. Simboliza su estado de ánimo: cuando más llena está,
más valor reúne, para salir, escapar de esa pesadilla de vida que le ha tocado,
cambiar todo lo que sea posible.
Cuando recibe la llamada telefónica, decide
salir, irse con su hijo... Pero Marcos de nuevo vacía la bañera, ahogando su
valor y sus fuerzas para abandonar.
El cinturón, muestra
el orden de las cosas, una tradición familiar, un machismo que va de generación
en generación.
Hasta llegar a Marcos, quien realmente quiere a su esposa, pero se
encuentra en una encrucijada con su familia, quien
parece que va a ser un apoyo para Julia, pero realmente es una tortura aún
mayor.
Ambas mujeres están
sometidas a la misma tortura que ella, por lo que le piden que no se oponga,
que será peor para ella, lo van a hacer de todas maneras, es como una
obligación, algo que venía incluido en su matrimonio, es lo que hay
que hacer.
Marquitos, su hijo,
corta esa tradición familiar. Encuentra el cinturón que su madre tiene
escondido en la bañera descubriéndo las heridas y moratones que le han sido
proporcionados. Se da cuenta de la realidad que recibe la mujer que le ha dado
la vida, y decide darle alas, ayudándola a esconder ese cinturón,
evitando de nuevo esos golpes y el martirio al que está sometida.
Poco a poco el pequeño
se va dando cuenta de la clase de persona que es su padre. Recuerda su avión
roto, el que nunca arregló, promesas incumplidas, engaños... Es el momento en
el que Marquitos pierde su ignorancia, se hace un hombre, se da cuenta de que
le quiere hacer cómplice de las barbaridades que él comete. Pero decide no
pasarse a su bando, ayudar a su madre a escapar. Esta dispuesto a cortar EL
ORDEN DE LAS COSAS.
Durante los
19 minutos aproximadamente de vídeo, se observa como pasa la vida de Julia,
como envejece su marido y como crece su hijo... Pero ella no evoluciona. Porque
se trata de una perspectiva de su vida. Desde que Julia recibe el primer
maltrato, ella esconde el cinturón, y observa como será su vida si permanece al
lado del hombre que la maltrata desde la bañera. Ve como los moratones aumentan,
como su energía se ve absorbida por el hombre con el que se casó, como no
hay escapatoria. Ve como no es libre.
La parte
final del video, muestra las consecuencias de su vida. Tras numerosas súplicas,
Julia le da el cinturón, pero no es un simple gesto. Se trata de un compromiso.
El cinturón o ella.
La bañera
por fin rebosa, Julia ha conseguido las fuerzas necesarias para salir de la
bañera, para abandonar e iniciar una nueva vida.
Todo se
inunda, y ambos se sumergen en el agua. De nuevo, Marcos joven aparece con el
cinturón en la mano, como antes de casarse, pero esta vez Julia sabe lo que
pasará si permanece a su lado, por lo que trata de arrebatarle el cinturón para
olvidarse de él, vivir con el hombre al que ama sin someterse al maltrato.
Pero él no
suelta. Él no es capaz de renunciar al cinturón, por lo que ha llegado la hora
de que Julia se marche, piense por ella misma, decida lo mejor… Abandonarle. Devolverle el anillo que muestra su compromiso, haciéndole ver que olvida todo, comienza de cero.
Marcos
realmente ama a Julia, pero ama una versión sumisa de ella. Le suplica que le
de el cinturón porque él no quiere golpearla ni abusar de ella, pero ha sido
educado para ello, por lo que finalmente elige el cinturón y no a su esposa.
La parte
final del video muestra el océano de libertades de Julia. Es una mujer nueva,
todo lo que ha vivido ya no existe, comienza de nuevo.
Tiene un mar
de posibilidades, de direcciones y objetivos. Cualquier cosa es posible ahora,
no está atada, nadie decide sobre ella. Comienza a nadar buscando la orilla
donde comenzar su nueva vida.
Y es en esa orilla, donde se observa la valentía
de las mujeres que le plantan cara a sus adversarios, que luchan por ellas
mismas, por su dignidad y por elegir como vivir.
Esas bañeras
muestran el abandono de la sumisión, el fin del suplicio vivido, el comienzo de
una nueva etapa, en las que ellas, son sus únicas dueñas.
Se acabó la
bañera, se acabó el agua, el aguante y los golpes.
Se acabó el pasado, comienza
el presente, comienzan sus vidas.
DISFRUTEN...
https://www.youtube.com/watch?v=hfGsrMBsX1Q